“La Memoria en las Células” es más que un libro. Es una herramienta que nos permite trabajar sobre
nuestros patrones de conducta mediante un método eficaz, desarrollado por su
autor, Luis Ángel Díaz, a partir de su propia experiencia e investigación.
Este poder
transformador del dolor es una de las bases del proceso CMR-Liberación de la
Memoria Celular, que el autor describe a lo largo del libro. Un proceso que
define como un conjunto de herramientas
capaces de transformar cualquier hábito negativo o patrón de comportamiento que
nos aparte de la armonía interior, desde las adicciones y compulsiones
hasta las emociones negativas y las obsesiones.
Dice Luis Ángel Díaz
que si uno es capaz de procesar las emociones negativas, entonces es posible
dejar atrás aquello que no nos permite disfrutar de nuestro ilimitado potencial
como seres humanos y tener así una vida más completa. Pero ¿Cómo es posible
llegar a esto? Para Díaz, todas las personas poseemos un Centro de Bienestar,
un lugar profundo de nuestro ser que se ocupa de nuestras funciones vitales, mentales
y emocionales. Este Centro de Bienestar tiene un enorme potencial de crecimiento
y auto-curación. Pero al vivir en un estado de “sueño” –denominado maya por los
orientales- perdemos
contacto con ese centro y sufrimos la paulatina fragmentación de nuestro ser. Con
el tiempo, sucesivas capas de sufrimiento acumulado, convertido en energía
negativa, nos impide retomar el contacto
con esa fuente de energía.
El proceso CMR permite
que esas energías negativas acumuladas se liberen y que el dolor se convierta
en potencial transformador de nuestra vida.
El libro de Díaz describe al ser humano como una madeja de info-energía integrada en un universo en donde todo es energía pura. Todo sucede dentro del campo electromagnético del universo y todo lo existente es parte de él. ¿Cómo lograr sentirnos parte plena de este universo de energía? “Cierra los ojos e imagínate sumergido en un océano de energía. Permítete ser parte de el…” dice Díaz. Somos el resultado de una “programación temprana” que comienza antes del propio nacimiento y que continúa a lo largo de los años, con la acumulación de miedos que nos vuelven vulnerables al dolor y al sufrimiento. El CRM, tal como nos lo propone el autor, nos lleva a recuperar nuestro primitivo Cuerpo de Luz y volver a ser como niños, "...guiándonos en el proceso de des-aprender lo que nos provoca dolor y nos aleja de nuestro ser auténtico y genuino…".
Luis Angel Díaz
A lo largo del texto,
Díaz avanza sobre la naturaleza del dolor, llevando al lector a comprender la
diferencia entre el dolor real, el imaginario y el crónico. Esta cuestión -junto con la compulsión a sufrir- es tratada en la primera parte de la obra y
nos permite abordar el tema central: La memoria celular, definida como un
conjunto complejo de archivos alojado en la biocomputadora humana. Esta
información abarca las experiencias del alma, las experiencias de nuestros
antepasados, la cultura en la que fuimos educados y nuestra propia experiencia.
El método expuesto por Díaz se propone transformar el dolor mediante un proceso
de liberación del cuerpo del dolor a fin de poder regresar al contacto con
nuestro Cuerpo de Luz, abrumado y escondido bajo las cargas y tensiones
acumuladas por el sufrimiento.
Lejos de platear una teoría sobre la terapia del dolor, La Memoria en las Células nos lleva, mediante ejercicios y
prácticas, a la posibilidad de la sanación y reprogramación de las redes
neuronales. En definitiva, un tratado sobre cómo reconvertir nuestra vida a
partir de un misterio encerrado en los millones de células que conforman
nuestro cuerpo y sostienen nuestra vida.
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